Luego de la tragedia ocurrida en el Parque Safari de Rancagua, cuando un tigre mató a una funcionaria del recinto, la Seremi del Trabajo decidió suspender el  establecimiento de manera indefinida.

En la investigación que se está llevando a cabo salieron más antecedentes, como que en mayo de este año, el Parque  ya tuvo una infracción por no cumplir las condiciones de seguridad para sus trabajadores y trabajadoras.

Fue así como Pamela Medina, Seremi del Trabajo, informó que Parque Safari no puede continuar sus actividades hasta que “adopten medidas de seguridad”.

Y añadió, “esta suspensión tiene el carácter de indefinido hasta que no se dé el cumplimiento de dichas medidas y que puedan ser aprobadas por parte de la Inspección del Trabajo”.

La familia de la joven fallecida, Catalina Torres,  señaló que lo que pasó no fue un accidente, sino una negligencia. De hecho, hace algunos días Javier Caro, pareja de la trabajadora, hizo algunas declaraciones.

“Esto no fue un accidente, fue una negligencia de la gente del Safari. Nosotros hicimos todo el procedimiento como se debía. En ningún momento nos advirtieron que había un tigre suelto”, señaló.

Otro dato no menor, desde fines de mayo pasado que el recinto se encuentra a la venta. El establecimiento, que consta de 20 hectáreas equipadas con instalaciones y cabañas para recibir a diversos animales, apareció en el portal www.sevendenegocio.net   dedicado a la comercialización de grandes terrenos en distintos puntos del mundo.