“Es extraño lo que ha pasado, es un misterio. Yo, volando
este avión, enfrenté emergencias, pero las comunicaciones seguían funcionando,
los Hércules siguen generando electricidad suficiente para mantener el contacto
radial mediante sus motores”.
Con estas palaras el general en retiro y experto en aeronaves, Jorge Ituarriaga Moreira, se refirió a El Mercurio, a las distintas hipótesis sobre lo sucedido con el avión que capotó, Hércules C- 130 de la Fuerza Aérea de Chile (FACh).
En base a su experiencia la causa de su desaparición se debe a algo que
fue muy rápido y que nadie alcanzó a reaccionar. “Debe haber sido algo muy
repentino, que no le dio tiempo a los pilotos para avisar que tenían una
emergencia”, declaró.
Con respecto a si hubo una falla de motor, Iturriaga Moreira fue enfático en que si hubiese
fallado solo uno, podrían haber seguido en vuelo. “En más de una oportunidad,
cuando ocurre una falla, se detiene un motor y el avión con tres motores sigue
a su destino. Incluso, con dos motores el avión sigue volando, y habiendo
perdido el 50% de la potencia hay que buscar un aeródromo lo más cerca
posible”, precisó.