El Oscar de este año debería ir para quien haya escrito el guión de 2020: el año empezó con los incendios de Australia, luego siguió la pandemia, en julio un buque petrolero naufragó en Mauricio derramando mil toneladas de petróleo… Y, por si fuera poco, el fin de semana que viene un asteroide chocará contra la Tierra. Se trata del 2018VP1. Por suerte apenas mide unos dos metros y lo más probable es que se desintegre al chocar contra la atmósfera terrestre. Con todo esto, no es extraño que muchos tomen precauciones. Y unos que los han hecho son los responsables de Oreo, las populares galletas de chocolate creadas en 1912.
La respuesta de Oreo al asteroide (y a la pandemia, los incendios y a un largo etcétera) es la misma que la del Banco Mundial de Semillas de Svalbard, el almacén subterráneo de semillas de miles de plantas de cultivo de todo el mundo, destinado a preservar las variedades vegetales en caso de una catástrofe. Así, los responsables de Oreo han construido su propia bóveda en donde se guardan todas las variedades y la receta secreta para que estas galletas de chocolate sobrevivan a eventos catastróficos.
El búnker se inspiró en el Banco Mundial de semillas y está localizado a un centenar de metros de éste. “Como precaución adicional – explica la empresa en un comunicado–, los paquetes de Oreo están envueltos en PET, un material que puede soportar temperaturas de -60º C hasta 170ºC, es impermeable a las reacciones químicas, la humedad y el aire y mantendrá las galletas frescas y protegidas durante los próximos años”.
La única duda es… en caso de una hecatombe, ¿quién ha sido designado para quedarse con la receta secreta? ¿El primero que llegue?
Fuente: www.larazon.es /Oreo / Archivo