Tras los malos resultados del Diagnóstico Integral de Aprendizajes, encabezado por la Agencia de la Calidad de la Educación, el Gobierno estaría evaluando impulsar la obligatoriedad del retorno a clases presenciales, desde julio.
Es que el diagnóstico fue catalogado por el ministro de Educación, Raúl Figueroa, como un verdadero “terremoto educacional”. El sondeo según indica el diario “La Tercera” señala que los estudiantes de Enseñanza Media no alcanzaron el 60% de los aprendizajes necesarios en el 2020, primer año en el que se implementó la modalidad de clases online a raíz de la crisis sanitaria por el coronavirus.
Con todo ese panorama, La Moneda estaría evaluando que el regreso a clases presenciales se registre después del término de vacaciones de invierno, pero “no de forma voluntaria”.
Si a esto le sumamos el gran avance de la vacunación contra el COVID-19 en Chile, donde la mayoría de los profesores completó su proceso en abril; el avance en el Plan Paso a Paso de las comunas que estaban en cuarentena; la baja tasa de contagios y brotes registrados en establecimientos educacionales; y los protocolos establecidos que, según el Mineduc, habrían sido exitosos.
Por lo pronto, la fecha del inicio de las vacaciones de invierno está fijada para el próximo 12 de julio; y desde las autoridades de Gobierno, por lo menos, habría incluso disposición que los establecimientos abran incluso en Cuarentena (Fase 1).
Al mismo tiempo no se descartaría, según señala el medio, un mecanismo de sanciones o subvenciones para incentivar el retorno a clases de manera presencial.
Eso sí hay que considerar, que todas estas declaraciones se realizaron horas antes que el país registrara 8.680 nuevos contagios, la segunda cifra más alta de la pandemia.